Francia tiene serios problemas de emigración, especialmente de magrebíes y no quiere repetir los errores del pasado. No quiere bolsas marginales de población que ni tan siquiera están medianamente integradas en la comunidad, no quiere guetos de “extranjeros” con lengua, costumbres y anhelos radicalmente distintos a los de la población que los acoge, por mucho que estos “extranjeros” hayan nacido en la propia Francia; eso es algo ya probado y padecido en Francia y otros lugares, como USA Y Alemania y siempre da malos resultados; es meter mini naciones dentro de la propia nación de acogida, con los consecuentes roces y enfrentamientos. Ya sabemos que el ideal socialdemócrata y europeísta dice otra cosa, que lo bonito y precioso” sería la total integración de los emigrantes y hacer de ellos “europeos de Pro”, cultos inteligentes e integrados totalmente en la Europa unida, pero en la práctica se ha demostrado que para que haya integración tiene que haber previamente un control exhaustivo en la entrada de extranjeros, ubicación, trabajo, permiso de residencia y que hay que “imbuirle” la cultura y costumbres nativas; sencillamente no vale el famoso: “papeles para todos”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario